- Los videojuegos se hacen accesibles a todos los terminales en la Madrid Games Week
Pensar que los videojuegos son sólo cosa de niños es algo que pocas personas se atreven a sostener a fecha de hoy. El sector del videojuego despega como uno de los sectores más rentables del mundo empresarial español pujando con fuerza con cada nueva iniciativa.
Este fin de semana se ha celebrado la Madrid Games Week en las instalaciones de IFEMA y al margen de poder probar en primera persona las novedades más importante del sector, tanto de las grandes empresas como Sony, Nintendo o Microsoft como de nuevas e importantes empresas independientes españolas, ha quedado demostrado que el mundo del videojuego es el que más factura de entre el resto de sectores creativos españoles.
De hecho, se prevé que el videojuego español facture en este año cerca de los 415 millones de euros. Este desarrollo se basa en la cada vez más accesible uso de tecnología, y la fácil distribución y desarrollo que permiten las nuevas tecnologías, cada vez más accesibles a todos; así como financiaciones como el crowfounding, de pequeños mecenazgos económicos.
Un tercio de los títulos que han estado presentes en esta feria del videojuego han sido españoles independientes, la mayoría de la mano de Gamelab Academy. De hecho, su importancia es creciente en el sector y en PlayStation Awards se incluyen ya 25 títulos españoles.
Esta feria del videojuego ha permitido probar nuevos productos directamente de la mano de sus creativos, como Rime, de Tequila Works; o Invokers Torunament, donde varios jugadores interactúan como hechiceros en un juego de acción.
Las conferencias también han sido uno de sus puntos fuertes, de la mano de Gamelab Academy, donde desarrolladores y usuarios han podido compartir informaciones, noticias, proyectos y productos novedosos.
El hardware de producción española también ha destacado con productos como las gafas de Víctor Ruiz, de FX Interactive, que han superado la sensación de mareo que producen otros productos similares en gafas 3D de inmersión en la escena, y al margen son compatibles con más dispositivos.
Un sector empresarial en plena e imparable expansión que ahora apuesta por buscar áreas nuevas de desarrollo, nuevos planos del juego, alejados de las más tradicionales basadas en luchas violentas o impresiones primarias, y que tratan de buscar una implicación del jugador distinta, en áreas de investigación, de exploración, de descubrimiento, desarrolladas dentro de los videojuegos, incluso de toma de decisiones morales como el producto del estudio Deconstructeam, con su videojuego Gods Hill be watching, en el que el jugador tiene que decidir conforme a sus principios; o Dogchild de Darío Ávalo, un juego sin violencia.
Una empresa que en nuestro país se crea en un perfil de pequeña y mediana empresa, con trabajadores muy especializados y generalmente jóvenes, expertos en el uso de videojuegos; de hecho, en esta feria los trabajadores de pruebas, han sido unos de los más envidiados, al disfrutar en su puesto de trabajo donde el objetivo es jugar diariamente con videojuegos, qué más se puede pedir, verdad?.
Madrid Games Week ha sido objeto de multitud de noticias en medios de comunicación, y ha revelado también la escasa regulación legal de este tipo de productos, donde queda mucho por desarrollar en el ámbito jurídico.